Jordi Ribalaygue publicaba ayer mismo, en El Mundo, el artículo SOS en La Mina para seguir denunciando “condiciones infrahumanas” , en el que expone la situación insostenible en la que se encuentran los vecinos y vecinas de Venus hoy en día y la necesidad de fondos para continuar el litigio “contra las instituciones que prometieron sacarlos de la degradación”.

Fotografia realizada por @desdelamina

La edad de las personas demandantes está por encima de los 50 años, y la gran mayoría de ellas tiene una renta que apenas les llega para vivir, con las que han de pagar los costes de un proceso judicial, y todo para que se reconozca su dignidad como personas y su derecho a una respuesta y una solución al laberinto en el que se ha convertido Venus y en el que están atrapadas sin remedio.

A las cuestiones burocráticas se le suman las cuestiones sociales, que hacen más complicada si cabe la convivencia en Venus y en La Mina. Jordi destaca la presencia de la droga en el edificio: “Algunos toxicómanos construyeron un campamento para alojarse en la terraza meses atrás; se desmanteló, pero ha empezado a reconstruirse”, y el preocupante impacto que está teniendo en el barrio.

Puedes leer el articulo completo en el siguiente enlace: SOS en La Mina para seguir denunciando “condiciones infrahumanas”